La Comuna
José Ángel Solorio Martínez
El Rey de la Bolita de la región cañera y Tesorero municipal de Mante, Tamaulipas, Rigoberto Rodríguez estafa ahora a la sociedad que gobierna. La presidenta Paty Chío de MORENA, evidentemente, está en el cochupo. Como se verá, salieron más voraces que las familias del PRI y del PAN, que gobernaron la urbe azucarera.
La gente sospechó del fracaso actual, cuando la alcaldesa confió el erario municipal al pueblerino tahúr profesional.
En Mante, ya se sabe de las malas artes de Chío y el mago de las raterías.
Lo que empezó con una esperanza de que haría un gobierno honesto y transparente, resultó una nueva versión de la cultura prianista del robo y del atraco.
Un fiasco, pues.
La esperanza se rompió en los primeros días de su administración.
En tanto el municipio está en el abandono en servicios públicos, culpa reiteradamente a los antecesores del ayuntamiento del desastre; lo cierto es que ha superado en ineficiencia a priistas y panistas. A la incapacidad de Paty se suma un equipo de bajo perfil en la estructura de gobierno municipal, que ha hecho más notable el fracaso del Segundo Piso de la IV T que profesa la presidenta Claudia Sheinbaum.
En la última sesión extraordinaria de Cabildo presidida por la alcaldesa Chío, se aprobó por unanimidad la inversión de hasta 2 millones 900 mil pesos, para la compra de un camión tipo Vactor. Esta cantidad, será utilizada de los recursos del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de los Municipios (Fortamun).
La propuesta la hizo Paty Chío.
Hasta ahí todo bien.
¿Quién se puede oponer al progreso de la ciudad?
Dijeron a dos voces Chío y el Rey de la Bolita:
“La inversión es para fortalecer los servicios públicos y mejorar el mantenimiento del sistema de drenaje y alcantarillado en la ciudad”.
El abierto pillaje de Paty y su Tesorero, está en los precios que maneja la empresa que vende maquinaria pesada, heavymachine.com.mx. El camión que piensa comprar el ayuntamiento tiene un costo de 34 mil 500 dólares.
Sí: aproximadamente, 700 mil pesos.
Con 2 millones 900 mil aprobados para la compra de esa unidad, sobrarían 2 millones 200 mil pesos.
¿Dónde están?
¿Dónde quedó la bolita?
Ganarle a Rigoberto está en chino.
Paty y su impresentable socio, tienen mucho qué aclarar.
En ese sólo negocio, se embolsarán 2 millones 200 mil pesitos.
¿Cuántos trinquetes similares, estarán preparando Paty y su cómplice?
Habrá que revisar el padrón de proveedores del municipio; nomás por curiosidad.
Paty Chío va que vuela, para convertirse en la Reyna de la Bolita.