Columna Opinión Económica y Financiera.
Dr. Jorge A. Lera Mejía.
Las remesas recibidas en México durante el 2024 sumaron 64,745 millones de dólares (mdd) una cifra sin precedentes para la captación de los llamados migra dólares desde que Banco de México registra estos envíos.
Comparando este cierre del 2024, contra el de 2023 que ascendió a 63,318 mdd, se superaron en 1,432 mdd al cierre del año pasado. Lo mismo con las registradas en 2022, con 58,868 mdd, se observa la tendencia ascendente. Sin embargo, se registró una desaceleración en dicho crecimiento, motivado a las caídas del monto mensual en noviembre y diciembre 2024.
Por lo anterior, el flujo de transferencias superó en 2.25% los envíos que hicieron los trabajadores mexicanos desplazados en 2023 cuando también se registró una entrada sin precedentes hasta ese momento de 63,318 millones de dólares.
Para ponderar el tamaño de estos envíos de dólares hacia los 1.8 millones de hogares beneficiados en México, basta tomar los ingresos registrados en el mismo año del 2024 por la exportación de petróleo, que ascendió a 28,436 millones de dólares.
Es decir, los mexicanos que trabajan en el exterior enviaron a sus familias poco más del doble de dólares de los que llegaron al país por la venta del hidrocarburo.
No obstante, al histórico flujo acumulado de remesas, se observa una consistente moderación en los envíos desde el año 2022 y tal como lo explican analistas de BBVA Research acumulan 14 meses con alta volatilidad.
Es decir, se han presentado entradas positivas pero el ritmo del ingreso se ha moderado respecto de meses previos y en ocasiones, se ha acelerado.
VOLATILIDAD PARA 2025:
De acuerdo a lo publicado hoy en El Economista, analistas de BBVA, Banorte y Goldman Sachs coincidieron en anticipar volatilidad a los envíos para este año.
Los temas migratorios y la seguridad en la frontera sur de Estados Unidos han sido los más álgidos para el segundo mandato de Donald Trump y al tener en la mira el freno a la migración irregular, puede reducir el flujo de envíos, advirtieron los economistas.
Los expertos de Banorte hicieron énfasis en que, a nivel anecdótico, ya hay ausencia de trabajadores en actividades agrícolas, de construcción y servicios.
En tanto, los expertos de BBVA tienen como escenario base un crecimiento de 3% en los envíos de nuestros paisanos para el 2025, pero con un sesgo a la baja debido a las señales de una menor absorción de mano de obra mexicana en Estados Unidos.
En tanto Alberto Ramos, economista para América Latina en Goldman Sachs anticipó que el mercado laboral estadounidense aún resistente, debería apoyar los flujos de remesas hacia México y la reciente depreciación del peso mexicano podría potenciar los envíos.
Sin embargo, matizó que no está claro cómo afectará el endurecimiento de las políticas migratorias estadounidenses ni las medidas para reducir el flujo de drogas ilícitas y el lavado de dinero.
Con él concuerda el vicepresidente y codirector de inversiones en Franklin Templeton, Luis Gonzali, quien considera que las remesas pueden desacelerar si no se justifica la procedencia de estos recursos.
Las empresas que se dedican a envíos de remesas van a estar bajo mayor escrutinio y será más difícil enviar remesas a México. Podríamos ver una bajada en los envíos de remesas que termine afectando al consumo.
TAMAULIPAS SE ESTANCA PARA 2024:
Tamaulipas recibió al cierre del 2024 solamente 1,016.7 millones de dólares (mdd), por lo que registró una disminución de 84.2 mdd respecto al cierre del 2023, cuando se recibieron 1,100.9 mdd. Por ello, el porcentaje de caída de remesas en Tamaulipas, fue de 7.65%.
Por lo citado, se infiere un estado de estancamiento en el comparativo con datos del 2023, de acuerdo con datos del Banco Nacional de México (Banxico).
Se puede interpretar qué esta caída de -7.65% es derivada del comportamiento de bajas que se registraron en las últimas semanas de los meses de noviembre y diciembre del 2024.
De acuerdo a la información del Banxico, en Tamaulipas hay por lo menos 230 mil familias que reciben remesas de dólares que son enviadas por sus familiares que realizan alguna actividad productiva en Estados Unidos, donde cada una de ellas recibe en promedio cinco mil dólares por año.
Las causas por las que se dejan de enviar remesas son varias, tomándose en cuenta que algunos migrantes fueron repatriados por las autoridades migratorias de EE.UU. regresados a sus lugares de origen, dejando de mandar la cantidad de recursos que disponían en forma puntual.
MUNICIPIOS DE TAMAULIPAS TAMBIÉN SE ESTANCAN:
En el tercer trimestre de 2024 los municipios de Tamaulipas con mayores ingresos por remesas fueron Victoria, al recibir 44.3 mdd, Matamoros en 2° lugar con 40.5 mdd y Reynosa 3° que recibió 34.1 mdd.
Le siguen de cerca los municipios de Nuevo Laredo, 4° lugar en recepción, Tampico 5° lugar, El Mante en 6° y Altamira en 7° lugar, con cortes por 8.3 mdd al tercer trimestre 2024 para Altamira.
Finalmente está en 8° Tula del Altiplano tamaulipeco, Río Bravo en el norte en 9° y Miguel Alemán en la llamada frontera chica, ocupó el 10° lugar de acuerdo a las remesas recibidas al tercer trimestre del 2024 según datos del Banxico.
El reciente estancamiento estatal de recepción de remesas podría afectar a los municipios citados, gran parte por el regreso de tamaulipecos repatriados por Donald Trump, o que voluntariamente deciden en retornar a Tamaulipas.
Por ello se empezaron a observar reducciones de remesas a Tamaulipas desde noviembre que fue reelecto Trump y amenazó desde su campaña redadas masivas para deportación y repatriación de migrantes.
CONCLUSIÓN:
En resumen, el panorama para las remesas hacia México y Tamaulipas es mixto, aunque se han alcanzado cifras récord y continúan siendo una fuente vital de ingresos para millones de familias, los desafíos económicos y políticos plantean incertidumbres para el futuro.
Las proyecciones para 2025 sugieren que factores externos e internos podrían influir significativamente en el flujo de dinero enviado por los migrantes mexicanos.
Mientras que las remesas han demostrado ser resilientes y han crecido hasta alcanzar cifras históricas, es fundamental considerar las dinámicas cambiantes del mercado laboral estadounidense y las políticas migratorias que podrían afectar esta importante fuente de ingresos para México.