Por José Medina
VICTORIA.- La congresista de Nuevo Laredo presentó una niciativa de decreto
que contiene un proyecto de resolución tiene el objeto de dejar sin efectos
jurídicos la Ley que Regula la Celebración de
Espectáculos Taurinos en el Estado de Tamaulipas.
De acuerdo con la Declaración de los Derechos de los animales en sus 14
artículos indica los derechos que tienen por su simple existencia y entre ellos
podemos encontrar en el artículo 3, lo siguiente:
«a) Ningún animal será sometido a malos tratos ni a actos crueles.
b) Si es necesaria la muerte de un animal, ésta debe ser instantánea, indolora y
no generadora de angustia. «
Porque una situación es matar a un animal sin sufrimiento y de manera rápida
para satisfacer una necesidad alimentaria, y otra muy diferente que una
matanza se vuelva un espectáculo público, lleno de crueldad, tortura y maltrato,
con el fin de «entretener» y tener lucro de ello.
En algunos países ya están prohibidos los espectáculos taurinos como
Argentina,
Canadá, Cuba, Dinamarca, Italia y Reino Unido, de acuerdo con Humane
Society
International, donde indican que aproximadamente en un año mueren alrededor
de 250miI toros.
Dejando pocos países donde aún son legales las corridas de toros como lo son
España (solo en algunas de sus ciudades), Portugal, México, Colombia,
Venezuela y Ecuador, entre otros.
Se debe entender que la prohibición de los espectáculos taurinos también
puede ser vista como un reflejo de un cambio en la conciencia social.
A medida que la sociedad se vuelve más consciente de los problemas éticos y
ambientales, la aceptación de prácticas que antes se consideraban normales
está en declive. Esto puede fomentar un ambiente de respeto hacia la vida y la
diversidad, contribuyendo a una sociedad más compasiva y menos tolerante
con la violencia.
En este sentido, la prohibición de los espectáculos taurinos se alinea con una
tendencia global hacia la abolición de prácticas que implican el sufrimiento
animal. Cada vez más países están reevaluando sus tradiciones y legislaciones
a la luz de un mundo que demanda un trato más humano hacia todos los seres
vivos.
Finalmente, la prohibición de los espectáculos taurinos es importante no solo
por el bienestar de los animales, sino también por el impacto cultural y social
que puede tener. Fomenta un cambio hacia una sociedad más ética, compasiva
y sostenible, y refleja una evolución en nuestra comprensión de lo que significa
vivir en armonía con los demás seres vivos.