PALACIO
Por Mario Díaz

-Asesinatos masivos empañan el segundo piso de la 4T
-Imparable la violencia en distintas entidades federativas
-Secretariado Ejecutivo documenta más muertes durante el morenismo
H. Matamoros, Tamaulipas.-De acuerdo a datos oficiales del Secretariado Ejecutivo del
Sistema Nacional de Seguridad Pública, el segundo piso de la Cuarta Transformación
tiende a igualar con el sexenio anterior el número de asesinatos en los primeros dos
meses de administración.
En efecto, a cinco semanas de haber asumido el poder Ejecutivo federal, la presidenta
CLAUDIA SHEINBAUM PARDO enfrenta una sangrienta estadística que registra 3 mil 39
víctimas, mientras que en los dos primeros meses del sexenio ANDRÉS MANUEL LÓPEZ
OBRADOR la macabra cifra llegó a 6 mil 15 muertes violentas.
Comparativamente, el sexenio morenista que recién terminó y el que lleva siete semanas
en funciones rebasan el número de muertes durante los primeros dos meses de los
períodos constitucionales panistas y la última administración priísta.
La estadística del Secretariado Ejecutivo del Sistema de Nacional de Seguridad Pública
precisa que durante los primeros 60 días de mandato del presidente VICENTE FOX
QUESADA se registraron mil 834 homicidios; el arranque de sexenio de FELIPE CALDERÓN
HIJNOJOSA indica mil 525; durante los dos primeros meses del período constitucional de
ENRIQUE PEÑA NIETO la sangrienta cifra fue de 4 mil 27 asesinatos; mientras que al
ajustar 40 días en el Palacio Nacional la estadística de CLAUDIA SHEINBAUM indica 3 mil
39 muertes violentas, más la que se acumulen durante los 20 días restantes de los dos
primeros meses.
El desglose de la estadística correspondiente al segundo piso de la 4T indica que durante
el mes de octubre se registraron 2 mil 293 asesinatos y, en los primeros diez días de
noviembre, se contabilizaron 746.
Si bien es cierto que las comparaciones son odiosas, también es cierto que esa es la triste
realidad que vive el país en materia de seguridad pública durante los primeros sendos
bimestres gobernados por el Movimiento de Regeneración Nacional.
Otra lectura indica que los sexenios gobernados por el panismo arrojaron menos
asesinatos durante los primeros 60 días, que las muertes violentas que se registraron en
ese mismo período durante el regreso del PRI a Los Pinos y en las dos administraciones
morenistas que han mudado al Palacio Nacional.

Cabe señalar que en el inicio de gobierno del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ
OBRADOR se registraron varios hechos sangrientos con víctimas mortales. El 6 de enero
de 2019 en un bar de Playa del Carmen, un comando armado asesinó a 7 parroquianos; el
día 9 del mismo mes se descubrió una fosa clandestina en Miguel Alemán, Tamaulipas, en
donde se localizaron 21 cadáveres; el 19 de abril en Minatitlán, Veracruz, murieron en
ataque armado 14 personas que se encontraban en una fiesta; y en agosto, también de
2019, sicarios abrieron fuego y asesinaron a 30 personas que se encontraban en un bar en
Coatzacoalcos, Veracruz.
Desde otra perspectiva, a pesar del corto tiempo de gobierno de la continuidad de la
Cuarta Transformación, la presidenta SHEINBAUM PARDO registra un saldo
extremadamente negativo en materia de seguridad pública derivado de las masacres
registradas en distintas entidades federativas, en el entendido que masacre se define
como el homicidio intencional y simultáneo de tres o más personas en estado de
indefensión.
El pasado 12 de octubre, en Chiapas, cuatro personas fueron asesinadas cuando convivían
en una casa-habitación; el 26 de octubre, en Tabasco, durante dos ataques armados se
masacraron a 7 individuos; el 30 de octubre, en Chiapas, sicarios asesinaron a una mujer
policía y a dos empleados de la CFE; el 2 de noviembre, en Guanajuato, tres custodios del
Centro de Readaptación Social fueron asesinados al salir de su turno de trabajo; mientras
que el 3 de noviembre, en Tabasco, tres personas fueron torturadas y después asesinadas.
La violencia continuó el 4 de noviembre, en Puebla, luego de que sujetos armados
asesinaron a dos policías y un civil a quien remataron en un centro hospitalario; el 6 de
noviembre, en Chiapas, fueron localizados tres cuerpos sin vida en un camino rural; el
mismo día, en Guerrero, las autoridades localizaron una camioneta con once personas,
entre ellos tres menores de edad y dos mujeres; el 9 de noviembre, en Querétaro, fueron
asesinados 10 personas que se encontraban en el interior del bar Los Cantaritos; y un día
después, en el estado de México, un ataque armado a un bar arrojó como saldo cinco
personas fallecidas tras ser acribilladas a balazos.
La semana pasada, sendos hechos de sangre se registraron en Quintana Roo y Tabasco. En
el destino paradisiaco del caribe mexicano, Cancún, fueron masacrados cuatro personas
en el interior de un bar, mientras que, en un establecimiento similar en Tabasco, seis
personas perdieron la vida. En ambos casos comandos armados irrumpieron masacraron a
sus víctimas.
Será por demás interesante conocer si el Secretario de Seguridad Pública federal, OMAR
GARCÍA HARFUCH, con facultades ampliadas constitucionalmente puede hacer frente los
grupos delictivos para, al menos, inhibir sus actividades que están afectando la
tranquilidad de la sociedad mexicana y, además, colapsando la cadena productiva con las
extorsiones y cobro de piso.

DESDE AL BALCÓN:
I.-Sin el menor ánimo pesimista, se antoja un tanto problemático que la Secretaría de la
Defensa Nacional y la Guardia Nacional acepten intercambiar información y compartir el
mando policial con el Secretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana de la
federación.
Pronto lo veremos.
Y hasta la próxima.
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