La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Tamaulipas (CODETH), reveló que en el caso del homicidio de un adolescente reynosense en manos de elementos de la Guardia Estatal “se puede presumir que existió abuso o exceso en el uso de la fuerza por parte de la autoridad”.
La CODETH, que encabeza la Dra. María Taide Garza Guerra refirió que los hechos acontecieron el 13 de octubre pasado y que esta instancia inició un expediente de queja y comenzó a documentar y atender la queja de la madre del menor mismo que se encuentra en integración, procediendo a solicitar y recabar la información correspondiente.
El 22 de octubre la Comisión emitió una medida cautelar para que se adoptaran de manera URGENTE todas aquellas acciones tendientes a garantizar la seguridad pública en la localidad de Reynosa, Tamaulipas y con la finalidad de preservar los derechos humanos a la paz, seguridad personal y a la vida de la población.
En un primer dictamen, la Comisión pidió reforzar la atención integral a la familia de la víctima, así como los protocolos implementados por los cuerpos de seguridad en el uso de la fuerza letal, así como las investigaciones penal y administrativa de los hechos, luego de solicitar informe de los hechos a la Seguridad Pública en el Estado.
“De las entrevistas que se han sostenido con los familiares y amigos del adolescente, se pudo documentar que era un joven dedicado a los estudios y trabajo, realizaba mandados a los vecinos y en sus ratos libres limpiaba solares y ayudaba en un taller, a fin de obtener gratificaciones para sostener un refugio de mascotas”, subraya el informe de Garza Guerra.
Asimismo, la madre del adolescente solicita una disculpa pública por parte del Guardia Estatal responsable de los hechos y demanda que sea aplicada la penalidad que corresponda por parte de la autoridad competente.
En los hechos, la Guardia Estatal documentó que habían sido agredidos con disparos y poncha llantas, sin embargo en la integración de la carpeta de investigación, se advirtió que el adolescente dio negativo a la prueba de rodizonato de sodio (por el uso de una arma de fuego), “además de resaltar que de las declaraciones que han recabado en dicha instancia ministerial se tiene documentado que la persona viajaba sola y no acompañada, lo que controvierte la versión oficial”.
