DESDE ESTA ESQUINA.
MELITON GUEVARA CASTILLO.


Se atribuye al filosofo griego acuñar a expresión de que el ser humano es un animal social,
que por lo tanto no puede vivir solo, que, para hacerlo, vivir solo, a menos que seas un
animal o que seas Dios. De esta manera se establece que los individuos para vivir, para
sobrevivir, necesitan de otros. Y efectivamente, así es como se va desarrollando el
individuo: de que, de una familia, se integra un clan, una ciudad hasta llegar a lo que
conocemos hoy como el Estado.
La organización social denominada Estado se integra cuando los hombres, viendo que
necesitaban de unos de otros, era necesario que hubiera una rectoría; así el Estado se
convierte en la entidad que administra los recursos de la sociedad, que impulsa y promueve
políticas que contribuyan a objetivos y propósitos comunes. Hay, sin embargo, en el Estado
una dirección de como se desarrollan esas políticas: el ejemplo mas claro lo tenemos con
los Estados Unidos, demócratas y republicanos, tienen quizá el mismo propósito, pero
caminos distintos para lograrlo.
ELITE E INTERESES.
Así como el individuo no puede vivir solo, resulta que lo mismo sucede con el Estado: así
como el individuo es interdependiente, por decir, con variables de la familia, los estudios o
la vida laboral; un país, depende de su política fiscal, de sus distintas políticas de acción, de
desarrollo e inversión, de el sistema educativo o el de salud. Siempre se ha dicho, por
ejemplo, que México depende mucho de la economía gringa: le vendemos la mayor parte
de nuestros recursos y le compramos la mayor parte de lo que usamos. ¿Qué sucedería si,
un día, ya no nos compran o ya no nos venden?
Hay elites gobernantes y hay intereses en juego. Por ejemplo, con el triunfo de Donald
Trump, con todo y que Claudia Sheinbaum nos pide calma, que no debemos preocuparnos,
no podemos olvidar lo que ya hizo, precisamente por su visión e intereses económicos: en
su primer año de gobierno, dijo que el cambio climático no existía y le quito el apoyo a los
organismos que promueven acciones sobre eso; en el caso de México, no lo olvidemos, se
propuso construir un muro para evitar la ola migrante, separo a madres de sus hijos. Bien lo
dicen: Estados Unidos tiene intereses, no amigos.
SI HAY PREOCUPACION.
Alicia Bárcenas es una bióloga, académica y diplomática mexicana. Fue embajadora en los
Estados Unidos, de eso hace 6 años, y conocer perfectamente la vida gringa como a sus
políticos y, de manera categórica, hagan de cuenta que desmiente a la presidenta: Si
debemos preocuparnos por el triunfo de Donaldo Trump y hace un recuento de las
decisiones de su primero gobierno como de las recientes promesas de campaña: todavía al
momento de proclamar su triunfo enfatiza que va a cerrar la frontera con México, que nos
pondrá impuesto del 25% a todo lo que le vendamos.

Creo que si debemos preocuparnos. Recordemos lo que sucedió cuando Trump hablo del
impuesto a las exportaciones mexicanas, sobre todo a la industria automotriz, que el dueño
de Tesla en menos que canta un gallo advirtió que la planta en Nuevo León quedaba en
suspenso hasta después de las elecciones. Creo que esta preocupación, en lo interno, debe
compartirla Marcelo Ebrard el secretario de economía: con la amenaza de los impuestos
obligo a México a enviar policías a la frontera sur, a impedir el avance de las caravanas
migrantes y México se convirtió, recuérdenlo, en tercer país anfitrión: hasta que les
autorizaran entrada a los Estados Unidos, de ahí los campamentos migrantes en los cruces
internacionales.
TODO CAMBIA CON EL GOBIERNO.
Yo creo que la mejor evidencia de que todo cambia cuando, digamos, se cambia el
gobierno lo tenemos aquí en México: perdió el PRI, gano MORENA y ahora la forma de
hacer política ha sido diferente, en algunos casos para mejorar y apoyar al pueblo; en otras
para destruir a la democracia, destruir la división de poderes y entronizar a un solo partido
en el poder, que sea predominante. Y en el caso de Estados Unidos, ese gobierno pendular
es lo que mantiene a las instituciones y hace correcciones a la forma de ejercer el poder.
Así, con la llegada de Trump nuevamente al gobierno de los Estados Unidos, algunas cosas
van a cambiar. Hay, por ejemplo, un pleito casado con China, por el dominio económico; y
México esta en medio, así que, entre unos y otros, pueden hacernos trizas. En relación con
la seguridad nacional, por ejemplo, Trump como los republicanos han estado insistiendo en
que los grupos de narcotraficantes tienen que ser considerados como terroristas… y darles
esta calificación por “seguridad nacional” Estados Unidos se adjudica el derecho de
atacarlos, combatirlos, donde estén: por eso, cuando fue presidente por primera vez Trump
ofreció que sus policías y militares pueden ayudarnos a combatirlos.
AFECTADOS.
Las decisiones y acciones que toma o realiza el gobierno nos afectan, directa o
indirectamente, a todos los gobernados; incluso, nos afectan si no las realizan. Siempre los
mexicanos guadalupanos decimos, le deseamos, al presidente (a) en turno que le vaya bien
a México. La cuestión es, sin embargo, que, si no le va bien, o no hace las cosas bien, todos
padecemos las consecuencias. Si hacen una escuela, un hospital o construyen una carretera,
los beneficios son enormes: pero si se equivocan, por decir, al no manejar correctamente las
finanzas públicas, si hay déficit o endeudamientos, a la larga, los paganos somos los
contribuyentes y el pueblo en general… Hay pobreza porque los gobiernos no han sido
capaces de redistribuir la riqueza generada.