Desde El Averno
Por: Susuki Esmeralda G

Se solicita persona de 25 a 35 años para trabajar en…

Es común ver este rango numérico en las convocatorias para ocupar un empleo, pareciera que las personas mayores de esta edad ya no son tan solicitadas para desempeñar una función laboral a medida que aumenta la edad la situación se complica más.

El bombardeo publicitario sobre el tema de “permanecer joven eternamente” cada vez es mayor, las personas pagan costosos y en ocasiones dolorosos tratamientos para conservar la apariencia juvenil que este mundo demanda para seguir vigente, hay quienes arriesgan su vida en busca de no mostrar signos de su edad, los estragos del tiempo son inevitables, lo cual se ha convertido en una verdadera preocupación y obsesión para muchas personas sin importar su género.

Todo ello ha venido a marcar una pauta en la forma en cómo se relacionan hoy las personas en la sociedad incluso la manera en que califican o descalifican una persona solo por la cantidad de canas o líneas de expresión en su rostro que el paso del tiempo ha dejado como huella de lo vivido.

El querer lucir una buena apariencia es totalmente correcto y comprensible, pero si esto se ha convertido en el centro de todo y se pierde el equilibrio terminará por demeritar lo que realmente importa en cada uno de nosotros.

El mantener una actitud madura, inteligente y equilibrada del tema nos ayuda a no sufrir en demasía por cosas que son parte de la naturaleza, el aceptar cada etapa de nuestra vida y todo lo que cada una implica nos dará la oportunidad de vivir plenamente cada día de nuestra historia de manera plena.

Existen personas que “se rehúsan a envejecer” al grado de caer en excesos poco saludables.

Por lo tanto, la aspiración de verse joven es un fenómeno complejo que involucra factores psicológicos, sociales y culturales.

La sociedad idealiza la juventud presentándola como un sinónimo de éxito, belleza y atractivo único debido a ello una gran cantidad de personas han desarrollado miedo al envejecimiento lo cual les ha generado múltiples problemas de salud, los ha llevado a perder su autoestima y confianza.

Es importante recordar que la belleza y el valor no están ligados exclusivamente a la juventud y que todo es parte de nuestra propia

percepción, aceptación, autoestima y amor propio, pero sobre todo nuestra madurez y equilibrio.

¡Hasta la próxima entrega!

Saludos cordiales desde el Averno.