Por José Gregorio Aguilar
Un total de 500 “muertos” de todo el Estado, “cobraron” 2 millones 400 mil pesos por concepto del pago de la pensión para el adulto mayor, informó el delegado de los Programas para el Bienestar en Tamaulipas, Luis Lauro Reyes Rodríguez.
Esos difuntos, que desde el más allá se aparecen cada vez que se paga la pensión, no son sino familiares de personas de la tercera edad que ya pasaron a mejor vida, razón por la cual, oficinas centrales de la dependencia investiga este robo a la nación para poder fincar responsabilidades.
El robo a la nación” fue informado a oficinas central y obviamente se hace una investigación por el órgano interno a ver qué fue lo que pasó, los programas del gobierno federal son programas nobles, se tiene confianza de que se les entrega el beneficio a la persona que lo requiere, pero tampoco estamos dispuestos a entregar una tarjeta a personas que hacen mal uso…estamos hablando de 4 mil 800 pesos bimestrales y son 500, entonces estaremos hablando de un número considerable”, precisó.
Sobre cómo fue detectada esta irregular situación, el funcionario respondió que este fraude se descubrió al momento de hacer el cambio de tarjetas, pues se descubrió que las familias no habían reportado el fallecimiento del adulto mayor.
“Estamos hablando de 500 tarjetas, es el aproximado que se tienen de las personas que migraron de otros bancos, Banorte, Banamex, Bancomer que emigraron de esos bancos al banco del Bienestar, se les empezó a citar desde hace más de 6 meses, por lógica no acudían, no estaban y hasta que se hizo la revisión directa en el domicilio y se solicitó la presencia de los beneficiarios fue cuando nos dimos cuenta que algunas personas ya habían fallecido”.
En un claro abuso de confianza, agregó el Delegado, algunas personas abusando de la confianza no entregaban dicho plástico y nos dimos a la tarea de ir a sus domicilios para poder hacer el trámite, nos dimos cuenta que ya no existían 500 personas; decirte que esas 500 personas estaban haciendo el daño, ya no tienen en su poder la manera de poder cobrar o recibir dinero que nos les corresponde”.
Después de confirmar que el beneficiario ya no existe, se les pidió a quien cobró la pensión devolver el dinero “se les dio oportunidad muchas veces porque sabían que incurrían en algo ilegal, esperaron hasta el último momento, hasta que se acudió, fuimos a sus domicilios y nos dimos cuenta que no existían. Hicimos el informe a la ciudad de México para que proceda la denuncia o devuelvan el dinero que fue entregado”.
Resumió que quien hace mal uso de la tarjeta y de los recursos públicos disponen de un tiempo razonable para que reintegren el dinero que indebidamente cobraron pero como en este caso los abusivos no respondieron, entonces lo que procede es hacer la denuncia directamente en oficinas centrales para que procedan legalmente.