Por; Jose Luis Avila.
Cd. Victoria, Tamps; Mas de 60 mil pequeños productores de granos de la entidad se verán afectados con las recientes modificaciones hechas en la miscelánea fiscal, al quedar fuera del régimen simplificado de confianza y obligar a que tributen más quienes menos ingresos tienen.
Según Jose Luis López Martínez, presidente del Consejo Estatal Agropecuario de Tamaulipas señalo que todo ello será como una “estocada” para los trabajadores del campo y generadores de alimentos y que representa casi el 90 por ciento.
Esta situación la califico como preocupante al establecer un nuevo esquema fiscal el cual entrara en vigor a partir del próximo 2022, por ello la necesidad de establecer algunas estrategas de solución para que las autoridades del Servicio de Administración Tributaria-SAT- defina soluciones para que el sector primario continúe tributando bajo condiciones justas.
Y textualmente dijo; “parece que pasó de largo, que los pequeños productores agrícolas, considerados históricamente personas morales por agruparse a asociaciones ganaderas, agrícolas de fondos de aseguramiento o de riego, no pueden favorecerse con el nuevo régimen de confianza y estarán obligados a tributar bajo el régimen general, lo que significará la muerte para muchos y agravará la crisis el campo».
Y es que de acuerdo con la miscelánea fiscal del año siguiente, el nuevo Régimen Simplificado de Confianza establece que si una persona física es socio o accionista de una persona moral no podrá tributar bajo el nuevo esquema, entonces esa medida afectara a 90% de los productores, que son quienes menos ganan, detalló.
Explicó que la agricultura es un negocio de gran capital, esto es el productor invierte 8 o 10 mil pesos por cada hectárea sembrada y tiene una utilidad de 5 al 10%, pero con la nueva disposición le aplican una tasa entre 10 y 20% de ISR, lo que es insostenible.
Además esto se ve agravado pues limita la deducción de gastos porque en el campo o zonas rurales, no hay negocios que emitan facturas electrónicas.
Por ello la necesidad de insistir para que la SAT haga las correcciones en la nueva miscelánea fiscal, y equilibre la carga tributaria a los pequeños productores.