CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- En lo que va del 2021 el gobierno de Tamaulipas ha atendido a 39 mil 169 pacientes con consultas médico-psiquiátricas y otorgado 2,318 pláticas psicoeducativas en beneficio de 27 mil 816 personas, informó la secretaria de Salud, Gloria Molina Gamboa al poner a disposición  de la población la red de servicios especializados en salud mental ubicados en las 12 jurisdicciones sanitarias del estado.

Añadió que el sistema estatal de salud cuenta con una capacidad instalada de 43 módulos de atención, 2 centros integrales de salud mental UNEME-CISAME, 18 centros de atención primaria en adicciones UNEME-CAPA, servicios de Psiquiatría en los hospitales generales de Ciudad Victoria, Matamoros y Ciudad Mante, además del Hospital Psiquiátrico Tampico, el Centro Estatal de Salud Mental en Matamoros y el Centro Renacer para la atención de las adicciones de Ciudad Victoria.

Destacó que los trastornos por depresión y ansiedad son problemas habituales de salud mental y los principales motivos de consulta, seguidos de los trastornos relacionados con el consumo de  alcohol, tabaco y otras drogas, esquizofrenia, epilepsia, demencias, trastornos de inicio de la Infancia y la adolescencia, conducta alimentaria y conducta de autolesión y suicida.

Sin embargo y ante la emergencia sanitaria del COVID-19  han aumentado los trastornos de ansiedad generalizada, ataques de pánico, depresión mayor, consumo de substancias adictivas, fobias, trastornos obsesivo-compulsivo, hipocondría, riesgo suicida, y estrés postraumático.

Y es que la pandemia puede afectar directamente a la población en general por el confinamiento y el exceso de información, muchas de las ocasiones falsas, en redes sociales,  a las personas con un diagnóstico positivo de COVID-19 y sus familias, así como al personal de salud por la carga de trabajo.

Ante ello, el gobierno del estado ha intensificado sus acciones de promoción del programa de Salud Mental, que tiene como objetivo prevenir el desarrollo de trastornos mentales y reducir los efectos secundarios productos de los mismos  que promueva la equidad y la calidad de  los servicios en sus diferentes niveles de intervención.

“Para otorgar una atención integral a la población que promueven los estilos de vida saludables y factores protectores, la prevención de trastornos mentales, neurológicos y por uso de substancias, la detección y diagnóstico oportuno, tratamiento ambulatorio, hospitalario, y rehabilitación psico-social, destacó Molina Gamboa.