Matamoros, Tamaulipas, 13 de abril de 2021.- México es un país marcado por la falta de igualdad, situación que nos afecta todos los días, y para muestra de ello son los sucesos que viven a diario los transmigrantes en nuestro país.

Los transmigrantes son personas originarias de Centroamérica que trabajan en Estados Unidos y atraviesan nuestro país con diferentes mercancías con destino a sus respectivas patrias. Cabe resaltar que en su mayoría trasladan vehículos americanos de segunda mano, los cuales los arreglan y los venden a precios muy reditables, en su país de origen.

Los Centroamericanos siguen dos rutas principales, de acuerdo con Amnistía Internacional. La primera es la del Océano Pacífico; y la segunda es la llamada ruta Golfo de México. En la ruta del Océano Pacífico está contemplado el paso por Puebla y Tlaxcala.

La mayoría de los indocumentados parten de Tapachula, Chiapas; siguen por Arriaga e Ixtepec en Oaxaca; luego pasan por Puebla. Desde el estado poblano, algunos se dirigen hacia el Golfo de México pero otros van para Lecherías o la Ciudad de México.

En el caso de la Ruta del Golfo, la mayoría sale de Tenosique en Tabasco y sigue hasta Veracruz; algunos llegan a Puebla pero otros siguen su camino que van rodeando el Golfo de México.

Dentro de las dos principales rutas, se identifica una subdivisión en cuatro caminos más que siguen los indocumentados en su paso hacia los Estados Unidos: las que desembocan en Tijuana y Nogales, las que llegan a Ciudad Juárez, la de Nuevo Laredo y la Ruta del Golfo que cierra en Matamoros.

Siendo la de Matamoros la más atractiva, pues se ha vuelto la ruta más segura, y donde los centroamericanos, han podido huir de los abusos, la violencia, y las dolorosas cuotas que los carteles de narcotráfico les piden en su pasar por México. Pues a la fecha el Gobierno del estado en conjunto con el Federal y Gobiernos municipales, han optado por implementar nuevos planes de seguridad, que garantice los derechos de los migrantes.

Pues consideran que esta situación favorecerá a tener una mayor derrama económica en la Aduana y en los comercios donde los transmigrantes se detengan en su paso hacia sus países de origen. Autoridades han referido, “El tráfico de transmigrantes contribuirá de alguna manera a nuestra base impositiva local a través de la venta de combustible, la venta de alimentos, cosas así”.

Beneficios que fortalecen la economía estatal y que ayudan hacerle frente a los tiempos de crisis, que estamos atravesando desde que inicio la pandemia.