Expediente… 

Por: Azahel Jaramillo H.-  

 

Cero.-  Gran parte del desastre—a punto de ser cerrado– en que se encuentra el Hospital General de Cd. Victoria “Dr. Norberto Treviño” se debe a una acción perversa, a una acción mal intencionada, a una acción de “hambre de dinero”, por parte de quien fuera director de ese nosocomio desde enero de 2017, el Dr. Xico González Uresti.  

         Y es que desde su fundación hace 30 años el referido Hospital General es un nosocomio de Gobierno del Estado para atender con tarifas muy razonables, bajas, a las familias que no tienen IMSS, ni ISSSTE. Y tuvo de siempre una particularidad: Todo el tercer piso del hospital estaba destinado a servicio privado, servicio de hospitalización particular, con cuotas obviamente más altas. Ahí iban y se atendían las personas de clase media y clase alta de la ciudad. Todo funcionó excelente por muchos años… los directores cobraban cuotas razonables a las familias de las clases populares y campesinas de Victoria  y la región (a veces hacían rebajas, condonaciones) y cobraban precios más altos a las familias pudientes (que las pueden, como dicen los jóvenes) de Ciudad Victoria.  

Y el H. General funcionaba correctamente porque tuvo varios directores muy profesionales, muy celosos de su deber. Y les menciono tres nombres: Dr. Alejandro Tirado Saldívar, Dr. Américo Villarreal Guerra, y Dr. Jorge Salinas Treviño.  

Era el Hospital General un nosocomio gubernamental, publico, con todo un piso para atención a las familias clase media y alta de Victoria.  

Pero al llegar el dizque “panista” Dr. Xico González  Uresti a Director del Hospital decide desaparecer, acabar, finiquitar el referido Tercer Piso de hospitalización privada. Y así miles de pesos dejaron de fluir a la caja del Hospital General, lo cual un poco o bastante posibilitaba hacer descuentos, rebajas, condonaciones a las familias de clase popular de Victoria y la región. 

¿Pero cual fue la verdadera razón del Dr. Xico para hacer eso? Muy fácil: obligar a buena parte de las familias pudientes a que se fueran a atender al hospital privado  que se ubica a escasos metros del Hospital General (y que se llama “Medica Norte Especialidades” ). Fue un perverso plan con maña. Xico es uno de los dueños de ese hospital. Desconocemos si el referido Dr. Xico es socio mayoritario o hasta donde… pero debe ser muy poderoso dentro dicho hospital—donde realizan cirugías, y demás—, así por ejemplo cuando fue candidato a alcalde de Cd. Victoria, postulado por el PAN, el referido Dr. Xico González hasta hacia conferencias de prensa en las instalaciones de dicho hospital privado. ¿Cuándo se ha visto que un candidato a alcalde haga entrevistas de presa dentro de un hospital?  Xico lo hizo.  

         Con la llegada de Xico González a la dirección del Hospital General este se vino abajo en forma paulatina, dejaron de funcionar los elevadores, cayó el servicio. Y luego el otro director nuevo que llegó al H. G. pues ya no pudo hacer nada. Hace unos días se registró un incendio debido a “falta de mantenimiento”.  

El Dr. Xico González es una calamidad. Tiene una acusación, documentada por la revista Proceso—de circulación nacional—donde se indica que el “angelito” nacido en Torreón es investigado por facturaciones falsas por monto de 25 millones de pesos cuando fue presidente municipal de Cd. Victoria. 

Vale decir que la diputada Patricia Pimentel del partido Movimiento Ciudadano, le tiene formulada una denuncia por malversación de fondos públicos. ¿Hasta cuándo la justicia de Tamaulipas va a proceder a dictaminar las denuncias que hay contra Xicoténcatl González Uresti?  

Ahora mismo corre el rumor, de que el lunes 11 de enero de 2021 será cesado como Sub Secretario de Salud en Tamaulipas. Esa es la versión que corre por Radio Pasillo, yo más bien creo que, a cómo están las cosas en el 15 Hidalgo más bien va a ser ascendido al cargo de Secretario de Salud que ostenta la Dra. Gloria Molina. ¿Voy bien o me regreso?   

En febrero de 2017 al llegar como Director del Hospital General “Dr. Norberto Treviño Zapata” llamó a junta a las secretarias y les dijo: “¿Qué necesitan? Pidan”. Le pidieron un horno microondas para calentar sus alimentos a la hora de la comida. “Correcto—les dijo Xico— junten el dinero que puedan y el día 15 me buscan para yo aportar el dinero que falte”. Cumplido el plazo lo buscaron. Tenemos tanto, dijeron. Y, sumamente divertido les respondió. “Miren, ya ven como organizadas salen las cosas. ¿Cuánto dinero les falta?”. Nos falta tanto, respondieron. “Bueno, ya les falta menos, síganse cooperando!”.  

Acabando su gestión de director, el Hospital General quedó hecho un desastre. Sin elevadores, sin quirófanos ni aire acondicionado. A CUIDARSE.