Por: Edelmira Cerecedo García.-
*.-Tuvo que ser la mujer plena y cabal, amorosa pero de gran temple, quien destrabó el problema.
*.-Fueron más de 20 años de conflictos.
Los pobladores del ejido Benito Juárez y un vecino de esa comunidad, sostenían un pleito por la posesión de un pozo abastecedor de agua, para uso doméstico y pecuario.
Noemy González, la alcaldesa de Xicoténcatl, acudió al lugar para dialogar con las dos partes.
Atenta, respetuosa y con la voluntad de lograr un buen acuerdo, se aprestó a escuchar y proponer.
Los habitantes del ejido y el propietario el predio en el que se encuentra el pozo, se dieron la mano…y el agua quedó a disposición de esa comunidad.
Lo primero, fue desazolvar, por lo que fue necesario el uso de una retroexcavadora, con la cual se abrió camino para llegar hasta el lugar en el que se encuentra el charco. Los trabajos comenzaron de inmediato y pronto habrá agua de calidad para el ejido, por el cual, sus habitantes le dieron las gracias a la presidenta municipal de Xicoténcatl por su intervención ya que solamente ella, pudo destrabar un conflicto de muchos años.
La política de Noemy González, de escuchar, atender y dar respuesta, sigue dando resultados.
Muy bien le va a un municipio que está en manos de gente que sabe atender sin distinciones, que escucha sin creer en chismes, que atiende de manera personal, sin enviados, ni mensajeros.