Mucho  ruido ha provocado la exigencia del Presidente ANDRES MANUEL LOPEZ OBRADOR a España para que se disculpe por la barbarie de la conquista, ojala no se trate de un distractor, de mantener la gente entretenida, por algo que no quiere el sistema dar explicaciones al pueblo.

Para ser honesta eso de la exigencia de disculpa no es ni para preocuparnos, más preocupados deberíamos estar de lo que realmente se cocina detrás de ella, porque es un hecho que LOPEZ OBRADOR y sus estrategas mediáticos desde tiempos de campaña han sabido como provocar estar en los medios, redes, pensamiento y boca de todos para lograr un fin, saben cómo captar la atención y de manejo de crisis.

Más que exigencia ociosa del presidente preocupa que el asunto de la disculpa sea un buen distractor al ver que el tigre comienza a despertar, que el pueblo ya no está muy convencido de que sea el presidente que necesitamos los mexicanos o cosa peor, que algo estén planeando y  no sea del todo bueno para los mexicanos razón por la que el tema de la conquista solo sea para ganar tiempo y mantener a la gente entretenida, distraída.

La verdad no es la primera vez que otros mandatarios exigen disculpas a países que les agraviaron, unas han sido ridículas, como la de NICOLAS MADURO que quiere hasta indemnización, otras aceptables, incluso la ANDRES MANUEL pudiera tener sentido si antes no se tuviera ya un acuerdo de olvido, paz y hermandad firmado entre España y México.

Igual se ha visto que algunos mandatarios públicamente ofrecen disculpas a otros pueblos o países pero no es lo mismo pedir que dar, además, cuando se disculpan el asunto es más mediático y político que de dignidad nacional.

Otra situación es que hay cosas  importantes que atender en México como para que el Presidente se distraiga exigiendo disculpas por lo sucedido ya hace 500 años, más aceptable seria  que no solo acusara sino que encarcelara y exigiera a sus antecesores se disculparan con el pueblo mexicano por tanto daño que le hicieron en la historia reciente a nuestro país y las violaciones a los derechos humanos, además de que también devuelvan la riqueza y dignidad que le robaron a la nación.

Cierto es que la escoria española saqueo, robo sus riquezas y mancilló la dignidad de los pueblos originarios y cometieron actos inhumanos pero hoy también se tienen mucha violaciones a los derechos humanos y nuestro país sufre de muchos males provocados por los políticos de la historia reciente.

Por lo tanto, en lugar de que pierda tiempo entreteniéndose con pasajes del pasado lo que el Presidente debe hacer es aplicarse en los asuntos del presente y futuro de nuestro país, hoy, como dijera LUIS DONALDO COLOSIO, el pueblo tiene hambre y sed de justicia social pero nuestro supremo gobierno anda más entretenido  exigiendo disculpas por lo que paso hace cientos de años en lugar de entregar buenos resultados.

No es que se acepte lo que la escoria española hizo con la raza de bronce pero como dijera el PAPA FRANCISCO, “Pasado pisado, presente de frente”, la dignidad de nuestros pueblos se recuperará con el trabajo de todos los mexicanos, la voluntad política y compromiso social de sus gobernantes no pidiendo disculpas que jamás llegaran.

El Presidente en lo que se debe enfocar es en rescatar la dignidad de los mexicanos pero haciendo que nuestro país sea competitivo, seguro, con mejores oportunidades de vida para todos, un lugar donde se puede vivir e invertir, que sea referente internacional de paz, armonía, bienestar y prosperidad, eso es lo que hoy importa.

Ahora, si de pedir disculpas se trata, pues el Presidente ANDRES MANUEL también debe pedirle perdón al pueblo mexicano, sobre todo a los que le dieron el voto de confianza pues cuenta la historia que los pobladores originarios de nuestro país creyeron que los españoles eran dioses y la maldita escoria española que llegó se burló, mancilló y destruyó los pueblos nobles, pues igual el pueblo bueno, como el mismo  LOPEZ OBRADOR le llama, le vieron  como mesías,  creyeron en él y les está fallando.

En fin, la situación es que el asunto de la exigencia del Presidente ANDRES MANUEL LOPEZ OBRADOR para que España se disculpe por lo sucedido en la conquista suena más a show armado que ha deseos que suceda, es obvio que él sabe que ya hay un acuerdo definitivo de paz y amistad firmado en 1836, pero el asunto puede ser buen distractor ante una crisis por malos resultados de la actual administración, ojala no sirva para ocultar algo peor.