SI, hoy 16 de diciembre es el día en el que litúrgicamente dan inicio las posadas, no las fiestas decembrinas, esas este año están canceladas debido a la pandemia y por ese motivo este año tampoco se podrá salir en procesión con el niñito DIOS, pero desde esta fecha en cada hogar podemos festejar su nacimiento con devoción. 

Porque el verdadero significado de las posadas no es solo la fiesta, comida y regalos, es festejar el regalo de la llegada del niño JESUS. 

Las posadas son para la religión católica una celebración de culto y con ella se fortalece el espíritu, se alimenta el alma, y consiste en nueve rosarios iniciando el día 16 y terminando el 24 de diciembre. 

Del 16 al 24 de diciembre va la representación de MARIA y JOSE de casa en casa pidiendo posada para acostar al niñito DIOS. 

Hoy sirven las fechas también para la reflexión porque la verdad es que ya poco vemos la representación con peregrinos y las rezanderas que llevan el niño DIOS de casa en casa donde quien lo recibe ofrece a los niños que acompañan la procesión golosinas después de rezar. 

En los rosarios se recuerda el viaje de la sagrada familia desde Galilea hasta Belén, donde el señor SAN JOSE acompañaba amorosamente a la Santa Virgen MARIA quien en su vientre llevaba a JESUS DE NAZARET.  

Pero la verdad ya poco se rezaba, el consumismo invadido la tradición de nuestro país, en las posadas casi nadie realizaba la procesión, el recuerdo del caminar de MARIA y JOSE hasta llegar a Belén pidiendo posada pocos lo recordaban. 

Y es que nos preocupábamos más por ver que nos regalaban o que regalábamos, contratar el karaoke y el atuendo que estrenábamos, la comida que degustábamos, con qué y quienes brindábamos. 

Ahora tenemos otra prioridad que es el evitar contagiarnos, que el COVID-19 no entre a nuestro hogar y en familia la navidad disfrutar y el nacimiento del niño JESUS recordar. 

Disfrutar de las posadas con procesión es nuestra tradición y en ellas siente paz y emoción, claro que también es agradable tener diversión pero eso lo dejaremos para otra ocasión, en estos tiempos se tendrá menos fiesta y más reflexión. 

Más que grandes gastos en estos tiempos difíciles, aprovechando el recuerdo del nacimiento de JESUS, los mexicanos deberíamos hacer una reflexión, refugiarnos un poco en la gracia de DIOS, pedir por la gente buena y por los que no lo son tanto también. 

La tradición dice que en las posadas se debe de romper piñatas para que con ello terminen los males, pues bien, en ese intento, es tiempo de apalear la piñata con el mal que se encuentra dentro y que ha llenado de tristeza y desesperación a muchas familias mexicanas y al resto de los mexicanos nos tiene en la desesperanza y desilusión. 

Contrarrestarlos todos los males con responsabilidad, amor, humildad, generosidad, paciencia, caridad, amistad. Sin grandes fiestas desde casa podemos celebrar que hoy es el día en que litúrgicamente inicia el tiempo de pedir posada.